1.10.09

SIN DIOS NI LEY

Como no tengo un dios que me haga su esposa
me resigno a los amantes carniceros que descuartizan mujeres
como animales
y en vez de rezarle a dios frente a los altares divinos
ando leyendo poemas Dayánicos
como plegarias desesperadas
que nadie oye y nadie lee en mis heridas

A falta de un dios que me haga su esposa
tengo veinte hombres que no alcanzan a hacer uno
y me emborracho antes de juntarme con cualquiera de ellos
hasta ver doble
e imaginar que estoy haciendo un trío

Sin dios ni ley me levanto
y cocino mi propia carne descuartizada
para probar mi amargura
y comprender que entre más moscas me rodean
más podrida me vuelvo

No hay comentarios: